viernes, 28 de agosto de 2015

Faltan 10 días. Empieza la cuenta atrás.

Se va acercando el día de comienzo de la aventura xacobea. Esta vez estoy más nervioso porque el camino es más exigente y la primera etapa es durilla. Vamos a pedalear mi amigo Eugenio, mi hijo Manuel y un servidor. Confío en que tengan piedad, que soy el veterano del grupo y no quiero dejar viuda todavía.
Este verano he entrenado poco, y cuando he hecho alguna ruta un poco más larga de lo habitual me he resentido de salva sea la parte. Llevaré un sillín de gel a ver si no termino tan perjudicado como el año pasado.
Tengo casi todo preparado. Me falta cambiar una cubierta, poner zapatas nuevas, coger una piedra para dejarla en la Cruz de Ferro, recoger la credencial y poco más. No tengo mucha confianza en la bici este año porque el cambio no va del todo fino, pero confío en que aguante. Como dice Carlota, me ha dado envidia Uxío con su bici nueva y quiero una igual.
Al ser un camino largo (10-11 etapas), he propuesto ir a una lavandería en León y a otra en Santiago, y eso me ha valido el sobrenombre de Hidalgo de la Mancha. A ver: el esfuerzo no está reñido con la limpieza, y yo no puedo dar la vuelta a los calzoncillos o a la camiseta y ¡hala!. Es más, el culotte del revés como que no lo acabo yo de ver.

viernes, 24 de abril de 2015

Ya tengo "mono" Xacobeo

El tío del Tao tiene mono Xacobeo y va a perpetrar un nuevo Camino: desde Madrid, con un par...
Con un par de compañeros, se entiende.
El fin de semana del 5 de septiembre se pondrá en marcha la segunda edición del camino de Santiago, y esta vez con todas las bendiciones. Partiremos de la Iglesia de Santiago en Madrid y si el tiempo nos respeta haremos el camino en 10 etapas.
Me acompañará esta vez mi amigo Eugenio (McGiver), el superintendente Joselu, mi hijo Manuel (si no está trabajando para entonces) y quien se anime a venir con nosotros.

domingo, 28 de septiembre de 2014

Fin do Camiño

El viernes 26 de septiembre, a las 15.00, entramos en Santiago con un tiempo veraniego.

Vaya por delante mi admiración por los peregrinos que hacen el Camino a pie. Realizan un esfuerzo extraordinario y muy superior al del ciclista.

La aventura ha resultado bien porque nos ha hecho un tiempo estupendo. Únicamente nos descargó una tormenta en Ponferrada. Manu pinchó dos veces camino de Palas de Rei y yo me caí tontamente llegando a Santiago. ¿A quién se le ocurre seguir hablando por teléfono cuando llega una cuesta abajo con piedras sueltas y agarrando solamente un freno? A mí. Por fortuna fue un aterrizaje suave y sin consecuencias. 

Afronté las etapas de montaña con más miedo que vergüenza pero he ganado confianza. Con esfuerzo y espíritu de superación se llega más lejos de lo que uno cree. Tararear "Hit the road, Jack" también ayuda.

En Galicia nos hemos encontrado con que las carreteras siempre suben o bajan, nunca son llanas. Desde aquí hago un llamamiento a los ingenieros de Caminos para que den más uso al nivel, esa herramienta que tiene burbujas, y que comprueben que la burbuja se quede en el centro.

Los tópicos que he reforzado o adquirido en este viaje, probablemente sin razón, son que los italianos son simpáticos, los irlandeses guasones, los alemanes serios y los coreanos raros. También pensé que los peregrinos serían considerados como "carteras con patas", pero no. Los precios de los establecimientos son muy comedidos, y en Galicia más aún.

Como Jose es un sommelier sin par, he tenido la ocasión de descubrir la uva Mencía. No está nada mal el vino del Bierzo. Claro que también hemos degustado el Albariño y el Ribeiro. No es bueno pasar sed.

Siguiendo con nuestra buena suerte, la tarde en que llegamos a Santiago pudimos recoger la Compostela y ver volar el botafumeiro desde la puerta de la Catedral que da a la Plaza de las Platerías (el botafumeiro solamente lo sacan los viernes en la misa de las 19:30 y en ocasiones señaladas)

Gracias, Joselu, por tu apoyo. Con tu colaboración hemos podido desentendernos de la logística. Los alojamientos reservados han estado fenomenal y nos has aligerado la carga cuando lo hemos necesitado. Por tu buen rollo, repetimos cuando quieras.

Manu: no podría encontrar un compañero de viaje mejor que tú. Los que te conocemos lo sabemos. Te quiero, hijo.

Gracias a mi madre y mis hermanos, que han estado siempre animando.

Javi, te he echado de menos, pero tus obligaciones no te habrían permitido acompañarnos. Gracias por tu cariño y por tu esfuerzo con los estudios. Eres un crack.

Carlota: tú y yo sí que estamos haciendo nuestro camino. Eres un cielo.

jueves, 25 de septiembre de 2014

Sexta etapa

Hoy sol y buen tiempo.

miércoles, 24 de septiembre de 2014

Final de la quinta etapa

Dice mi hermanita pequeña que leyendo el blog se me nota que tengo pocas ganas de escribir. Como no sé si se refiere al tamaño o a la calidad, voy a aumentar el primero ya que lo segundo no tiene solución.
No voy a quejarme de los dolores porque es muy vulgar y porque el dolor es consustancial a la condición de peregrino.
Hoy me ha dado por pensar en qué es lo que hago yo haciendo el camino de Santiago, y la verdad es que no lo sé, pero estoy disfrutando de la experiencia. Sigo creyendo lo mismo que antes, por lo que como experiencia mística no me está sirviendo. En algún momento me gustaría repetir el camino pero haciéndolo a pie, porque sería una forma más sosegada de tomar contacto con la gente y con la tierra.
Subiendo esos puertos interminables me he propuesto no fijar la vista demasiado lejos, sino pensar en alcanzar la siguiente curva, la siguiente señal, mirar al suelo,.. De esa forma, poco a poco, poniéndome metas asumibles, he logrado llegar arriba. Supongo que ese método es igualmente válido en muchos otros aspectos de la vida. ¡Lo que da de sí el pedaleo! 
No he dormido en albergue ninguna noche, y no sé si es por suerte o por desgracia, porque hemos visto a algún personaje con el que es mejor no coincidir de compañero de litera. ¿Cómo se le ocurre a nadie andar descalzo y semidesnudo por las calles de Samos? En Guirilandia creen que en España todo vale.
Con respecto a la etapa, se nos ha dado bastante bien y estamos durmiendo (yo todavía no) en Sarria, de donde partiremos mañana para llegar a Palas de Rei. Parece que va a hacer buen tiempo, aunque ya por la tarde va refrescando bastante. Nos queda después la etapa del viernes en la que esperamos llegar a Santiago. Hoy hemos aprovechado para limpiar y engrasar las bicis, que ya se estaban quejando.
Buenas noches ZZZzzz

martes, 23 de septiembre de 2014

Quinta etapa

Después de la etapa de ayer pensé que me iba a levantar convaleciente pero estoy mejor de lo que creía. Debió ser el vino que hacen por aquí que es como el bálsamo de Fierabrás. No hubo visita turística porque no nos dio tiempo tras la madre de todas las etapas.
Hoy salimos de Valcarce y llegaremos a Sarria, afrontando a la salida el ascenso a Cebreiro. ¿Quién dijo miedo?
(no hay fotos porque el móvil se quedó sin batería)

lunes, 22 de septiembre de 2014

Cuarta etapa

Ayer fue una jornada relajada. Llegamos pronto a Astorga, comimos en el hostal y descansamos un poco. Como fue lunes nzodiaNunca coo abrieron los museos y nos quedamos sin poder ver por dentro el obispado, obra de Gaudí. Por la tarde café con mantecada y por la noche cena en el Hotel Gaudí, lugar elegante en pleno conjunto monumental (y barato).
Esta mañana (7 am) no parece estar lloviendo. Ojalá siga así el tiempo porque hoy va a ser un día duro.

Al final nos hemos mojado en Ponferrada. La etapa ha resultado larga y dura, y ahora a descansar para subir mañana O Cebreiro. Nunca había pedaleado 98 kms en un solo dia. Estamos alojados ello en el mismo hotel que el equipo ruso de ciclismo.  A ver si me equivoco y cojo una bici que no es mia. Manu se ha picado con una holandesa subiendo la cruz de ferro y ha logrado seguirla. Deben ser las feromonas.